Lucios entre cañaverales costeros
Foto: Tiit Hunt
Lucio
Lucio Esox lucius
El otoño es esa época del año cuando el lucio se esconde entre los cañaverales costeros de aguas salobres, esa época donde los pescadores obtienen buenas capturas. No hay diferencias entre la temperatura del aire y del agua –ambas unos 9 grados- y el estado del agua es óptimo. Naturalmente está invasión otoñal llega a cada zona en momentos algo diferentes…
La coloración y el dibujo de la piel de los lucios son muy variables. La cabeza y el dorso son negro verdosos. Los flancos, desde grises con sombras amarillentas hasta verde oliva. Debajo de la garganta y en la zona ventral blanco, de amarillento a grisáceo.
Las hembras alcanzan tamaños mayores y son más longevas.
Naturalmente, las mejores cualidades culinarias son la de un lucio bien alimentando capturado en otoño.