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Este año la puesta en marcha de la cámara invernal de la plaza donde se alimentan a las águilas marinas, se ha llevado a cabo un poco más tarde que en años anteriores.La pusimos en funcionamiento con Tiit y Joosep el 8 de diciembre, aunque la voz la conseguimos con la ayuda de Beta Group, tan solo a pricipios de Año Nuevo. En parte, es debido al clima ya que el lago del bosque que funciona como plaza de mirador no se hiela y es complicado dejar la comida en el suelo. A la plataforma que construimos en el agua, no quisieron venir ni siquiera los cuervos, sin mencionar a las águilas, aunque allí colocamos zorros o conejos que habíamos recogido de la carretera.

 

Ahora usamos una cámara nueva con la ayuda del Centro de Inversión Medioambiental (Keskonnainvesteeringute Keskus), que permite a un operador autorizado dirigirla, es decir, moverla y enfocarla. La cámara nueva no tiene micrófono interior, por lo tanto para encontrar un micrófono extra que se adecuara a condiciones exteriores y adquirir el dinero, ha llevado un tiempo.

 

Como es de costumbre, tenemos a mucha gente estupenda involucrada en elproyecto. Kernel, por ejemplo, ayudó a poner en marcha el sistema de transmisión después de la parada de verano; Loodusemees.ee ayuda con el material ilustrativo; y el programa ESTLAT,mediante el proyecto «Águilas cruzan fronteras» de la Sociedad Ornitológica de Estonia, seocupa del sistema general dos temporadas. El equipo electricista dirigido por Tiit Randla, miembro Multikulti del foro Looduskalender comprueba, entre otras cosas, que los operadores no se queden dormidos.

 

Ya que se permite compartir la imagen de la cámara nueva en el servidor EENeti sin la necesidad de otro ordenador que la coordine, esta vez no se podrá observar lo que occurre delante de la cámara en el formato habitual vía mediaplayer, sino directamente desde el navegador. Es posible que ello requiera un nuevo enfoque en la realizacióin de vídeos y fotos...

Joosep y Tiit montando la cámara nueva       Foto: Urmas Sellis

Patrocinadores: el programa ESTLAT y el Centro de Inversión Medioambiental (KIK)