Para los osos, el bosque es como una mesa llena de sabrosos alimentos. Si tres semanas atrás eran los arándanos, ahora pueden también alimentarse ya que en los humedales hay muchas bayas y los osos conocen muy bien los lugares donde crecen los frutos del bosque. En la zona protegida de Leidissoo en Läänemaa, una fresca deposición de oso encontrada de casualidad tenía un color totalmente negro debido a los arándanos. Las huellas confirmaron que el oso se había alimentado estando sentado, cogiendo las arándanos tanto con la garra derecha como con la izquierda, y se trasladaba de posición poco a poco moviendo el trasero hasta acercarse a la comida. Una superficie de unos seis metros cuadrados había quedado totalmente arrasada.