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En estos días los berrridos de los machos de ciervo son muy escasos y se oyen sólo en las horas nocturnas, bien sea en las primeras horas de la noche, a medianoche o en las primeras horas antes de amanecer. Hemos podido ver ya delante de la cámara a varias hembras, las cuales se desplazan en  solitario o en pares. En la época de celo los grandes machos de al menos seis años de edad mantienen su “harén”. Las hembras alcanzan la madurez sexual en el tercer año de vida y el periodo de gestación dura unas treinta y cinco semanas, de modo que a finales de mayo se espera en Saaremaa la descendencia de las hembras de ciervo.